Viernes... ¡CAFÉ!!!

   Cuando se tiene la dicha de despertar por el canto de los pájaros... se tiene todo. Abrir la ventana y respirar el aire fresco de la mañana... llena el alma de energía pura. Recorrer la casa y descubrir en el almanaque que ha llegado el mes de diciembre... es dar vuelta una página más de nuestra historia.

   Entre cada sorbo de café y trozos de tostadas con restos de mermelada de naranja que preparé en una de las entradas, pienso en el sabor amargo que nos dejó noviembre y trato de rescatar aquellos instantes que llenaron el alma de felicidad.

   Justo un mes atrás un mensaje enviado por una compañera del secundario, María Cristina Mora, me llenó de ilusiones. ¡Nos íbamos a reunir para festejar nuestros 49 años de egresados!!!

   ¡Cómo había volado el tiempo! ¿Qué alas misteriosas nos llevaron por distintos caminos? 
   Promoción 1968 de la Escuela Normal Mixta Florentino Ameghino (Luján)...

¡BIENVENIDOS!!!

   Y aquel grupo de soñadores volvió a reencontrarse, esta vez, en La Carolina Restaurante de campo el sábado 25 de noviembre en la ciudad de Luján. Confieso que bajar del auto y dar los primeros pasos hacia el grupo que esperaba debajo de la frondosa sombra que regala ese lugar, fue como iniciar un fugaz viaje al pasado. 

   Cientos de imágenes cruzaron por mi cabeza... y la pregunta crucial... ¿me reconocerían?...  ¿los reconocería? El trayecto que me separaba desde la entrada hasta donde se encontraban me devolvió la tranquilidad al comprobar que ellos se encontraban en la misma situación.

   Después de los abrazos y saludos todos recobramos la calma. Continuó la charla normal... las fotos y los llamaditos telefónicos averiguando por quienes estaban demorados.

    El lugar merecía que lo visitáramos antes del almuerzo. Mientras algunos conversaban... otros recorríamos La Carolina.

   En un predio de 10 hectáreas con un quincho para 300 personas, entre una arboleda de eucaliptus (eucalipto), se levanta el restaurante de campo La Carolina. Es un emprendimiento familiar donde, quien lo visite, podrá encontrar comida casera y una sabrosa parrilla con buena carne. Los fiambres también son de elaboración propia.

   El menú que sirven está compuesto por picada de campo con empanadas, asado completo, pastas caseras y variedad de postres.

   Realizan toda clase de eventos sociales, familiares y empresariales.

   Hermoso lugar para comer bien... descansar bajo su gran arboleda y pasar un grato momento junto a la familia o amigos. ¡Así como lo pasamos nosotros!

   Pueden visitar su página y conocer más datos sobre este lugar.

Horario: Viernes, sábado y domingo. 11 a 17 hs.
Dirección: Acceso Oeste (Gaona) y Beschett
Teléfono: 02323-424851/011-15-45631406
Web: www.restolacarolina.com.ar
Email: info@restolacarolina.com.ar

   Sin darnos cuenta entre charlas... fotos y recorrida... ¡llegó el almuerzo!!!
Con esmerada atención, el personal comenzó a ofrecernos las delicias de la casa.
¡Momento sublime!!!

   Y con el almuerzo llegaron más fotos y el brindis para estampar el buen momento que estábamos pasando.

  Mientras todo seguía su curso aproveché para conversar con Gustavo dueño del lugar, y consultarle sobre algunas delicias que había estado probando. Con la paciencia que lo caracteriza me contó cómo se preparaban. Por supuesto, hoy comparto con ustedes esas recetas mágicas. ¡No dejen de prepararlas para acompañar el asadito del domingo!

ENCURTIDOS

ZANAHORIAS

Ingredientes:

Zanahorias 1/2 kg

Azúcar 110 g

Vinagre de alcohol 300 cc

Especias aromáticas a elección (las más usadas son orégano, laurel y pimienta negra en grano)

Preparación:

Lavar, pelar y cortar en bastones pequeños (5 cm) las zanahorias.

Colocar un fondo de aceite en una sartén y sofreir los bastones (o dar un hervor en agua).Retirarlos y reposar.

Preparar un frasco grande previamente esterilizado en agua hirviendo. Dentro de este envase, seco y a temperatura ambiente, colocar el vinagre, el azúcar, los condimentos. Mezclar bien y luego agregar los bastoncitos de zanahorias.  Tapar el frasco y, si la tentación lo permite, dejar reposar durante una semana.

ZUCCHINI

Ingredientes:

Zucchinis 500g

Vinagre blanco 3 tazas

Agua 3 tazas

Pimienta en grano- laurel-orégano a gusto

Preparación:

Lavar, pelar y cortar en rodajas no muy gruesas o trozos pequeños los zucchinis.

Colocar en una olla el agua y el vinagre con los condimentos.

Agregar los vegetales y dar un hervor hasta tiernizar. Controlar que no se deshagan.

Dejar enfriar en el mismo líquido y una vez frío, envasar todo en un frasco esterilizado.

   Servir en pequeños recipientes para acompañar un sabroso asado y... ¡a disfrutar!.

   Para los fanáticos del horno de barro... les sugiero este plato que acompañó nuestro asado:

Papas con su cáscara cortadas en rodajas o en cuartos con aceite, sal y verduras : cebollas y morrones. ¡Una maravilla!!!

   Recuerdos van... fotos vienen... ¡llegó la tarde! El espacio verde y amplio nos permitió sentarnos bajo el sol. Un cielo celeste... luminoso fue testigo de un deseado y merecido reencuentro.

   Casi sin darnos cuenta el atardecer se había instalado. La Carolina nos convidó con una sabrosa pastafrola y un exquisito brownie con nueces... ¡y arrancó la mateada!!! Mate que pasaba de mano en mano como tratando de aferrarse para que el tiempo no siguiera pasando. 

   Despacio... la timidez se fue adueñando de nosotros y había que dar el primer paso. Alguien... no sé quién fue el primero, inició la despedida.

   Con las últimas luces de la tarde cada auto, llevando a bordo aquellos jóvenes soñadores, iba ingresando lentamente a la caravana que iniciaba el regreso a lo largo de las filas de árboles. La Carolina quedaba atrás. El día de campo también. Pero nosotros sonrientes por el día vivido.

   Queridos compañeros... ¡MUCHAS GRACIAS por este bello e inolvidable reencuentro!!!

La vida nos presentó hace 49 años y ella misma se encargó de separarnos. Hoy quiso hacernos el mejor de sus regalos reuniéndonos en un cálido almuerzo.

   Para quienes decidieron salir de gira en forma apresurada... sin aviso... guardamos de ellos, en un rincón de nuestro corazón, su tierna sonrisa. ¡Por siempre estarán allí!

   Amigos...... siempre que aparecen las emociones y sentimientos en el blog, el acto de escribir se torna difícil. No fue tarea fácil armarlo. Cada palabra...... cada foto...... hizo que me detuviera y muchas veces..... una lágrima traviesa detuviera mi trabajo.

   Esta alegría que deja todo reencuentro siempre tiene un tinte nostálgico por quienes ya no están. 

   Si se animaron a acompañarnos en este recorrido, espero lo hayan disfrutado. Es un gesto maravilloso hacia un grupo de personas llenas de sueños y con ganas de empezar "de nuevo" cada día.

   ¡Buen fin de semana junto a la familia y que el mes de diciembre los colme de bendiciones!

Silvia